Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
En ocasión de los 150 años del natalicio del líder indio Mahatma Gandhi se inauguró una muestra fotográfica con cerca de 30 imágenes, en la Casa de Asia, en el Centro Histórico habanero.
Se trata de Gandhi: vida y obra, exposición que recrea diferentes momentos de la vida del Mahatma (título concedido por Rabindranath Tagore que significa “Alma Grande”), desde sus primeros años de vida, su estancia en Sudáfrica, intensa labor en su tierra natal y, por último, su muerte.
La muestra reúne reproducciones del National Gandhi Museum, perteneciente a la colección de la Biblioteca Rabindranath Tagore de esa institución patrimonial de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana.
El pacifista y político indio ha sido recordado con una jornada que ha incluido la colocación de una ofrenda floral en el monumento consagrado a su figura, en el Parque Miramar, en La Habana y una acción cultural interactiva con niños, dirigida principalmente a escolares de la educación primaria, en la biblioteca especializada Rabindranath Tagore, de la Casa de Asia.
También se previó la presentación del audiovisual Músicos del Mundo cantan a Gandhi, con artistas de más de 124 países y de Cuba, y un conversatorio acerca de la vida de Gandhi, a cargo del Sr. Amitt Shreeansh, de la Embajada de la India en Cuba, en esa propia institución.
Situada en Mercaderes núm. 111, la Casa Museo de Asia evoca, mediante su programa sociocultural, los vínculos históricos, culturales y comerciales que distinguieron las relaciones de Cuba con el Oriente desde el siglo XVII, y se consolidaron a mediados del XIX y el XX con la inmigración y permanencia de las comunidades chinas y japonesas primero, y otras de origen asiático después.
Un recorrido por las salas de exposiciones permanentes de la Casa de Asia, muestra al Galeón de Manila surcando las aguas del Océano Pacífico cargado de exóticas mercaderías; suntuosos objetos destinados a enriquecer las arcas de la metrópoli española, que dejaron su impronta en Cuba y específicamente en la ciudad, al ser el puerto de La Habana punto obligado de reunión de la flota que custodiaba y trasladaba las grandes riquezas a España.
La institución patrimonial promueve expresiones culturales de origen asiático que desde antaño existieron en La Habana, inserta en la estrategia de rescate del patrimonio cultural de la Oficina del Historiador de la Ciudad. En sus espacios se realizan numerosas acciones culturales, como exposiciones transitorias, conferencias, encuentros, cursos, talleres y espectáculos, entre otros, cuyo objetivo es difundir la diversidad y riqueza de una cultura milenaria.