La muestra La enfermedad del olvido de Dayana Trigo, quedará inaugurada este viernes 21 de junio, a las cinco de la tarde, en la Casa Oswaldo Guayasmín, y permanecerá abierta al público hasta el 24 de julio.
Por: Dariana R. Barral
Verla sentada revestida de pintura, con total descuido, casi a cuerpo completo, refuerza su perenne enfermedad por olvidarse de lo que debe ser olvidado. Ahora solo ella y su creación importan en el espacio que ocupa la muestra en la Casa Oswaldo Guayasamín. Con un marcado carácter intimista La enfermedad del olvido, apuesta por exponer las travesías que recorre Dayana Trigo en su afán por perder la memoria.
¿Cuál es tu formación y cómo te incorporas a la Pragmática?
Empecé a estudiar en San Alejandro cuando tenía quince años. Ahí pase cuatro años, hice las pruebas del ISA y actualmente estoy en 4to año. En el curso en que yo entré a la Pragmática hubo un grupo muy grande, de 30 personas, e hicimos una exposición donde trabajamos todo ese tiempo con tres profesores. A final surgió una exposición que se llamaba A río revuelto. Cuando estaba en segundo año el profesor René Francisco realizó una convocatoria a la cual se inscribían los estudiantes interesados, de ahí él hizo una selección a partir del trabajo de 1er año. Finalmente quedamos la mitad y se conformó un semigrupo que fue la 4ta Pragmática, por ser esa la edición número 4 de ese proyecto artístico-pedagógico.
¿Es esta tu primera exposición personal? ¿Por qué titular de esa manera?
Sí, es mi primera exposición personal. Normalmente yo hago un proyecto completo concebido desde el principio hasta el final. Este ha ido evolucionando. Al principio el proyecto tenía un título que se llamaba Te voy a contar historias que ya me has contado…, que básicamente era muy parecida a la actual muestra: una división de dos espacios, a través de los cuales se llega a una habitación final. Pero no estaba tan relacionado con mi vida, con lo que estaba viviendo. Eso cambió, porque me estaban pasando cosas nuevas en el momento de la creación, se tornó más hacia mí. Se trata menos de un diálogo exterior y va más hacia la expresión interior, en relación con las personas que me rodean, y de lo que me ha sucedido en estos tres meses en los que he estado concibiendo la exposición.
El título actual, La enfermedad del olvido tiene que ver con rupturas, comienzos. La cuestión del olvido recurre a los rompimientos y a la estela de vacío y las contradicciones que dejan. Habla de cómo seguir, de cómo continuar viviendo y enlazar esos vacíos con nuevas experiencias. Tiene en cuenta ese letargo que perdura sobre lo que vas eligiendo dejar en tu mente y lo que decides borrar, sellar.
¿Qué verán quienes decidan visitar esta exposición?
Fundamentalmente verán instalaciones donde el dibujo tiene un papel protagónico. Se llevarán consigo muchas experiencias personales de Dayana Trigo.
