Por: Yimel Díaz Malmierca
Música de excelentes compositores, interpretada con maestría y profesionalidad, habitará por estos días diversos espacios habaneros gracias a la VIII edición del Festival Mozart Habana. El evento comenzó este domingo en el Oratorio San Felipe Neri con un concierto protagonizado por el pianista español Jorge Negrín, la Orquesta del Lyceum de La Habana (OLH) y la Academia Orquestal Juvenil. Interpretaron obras de Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791) y de Julián Orbón (1925-1991).
El festival, bajo la dirección general de Ulises Hernández, hilará 9 espectáculos que tendrán como invitados al ya mencionado Jorge Negrín; los jóvenes pianistas Alexandra Kaptein (Países Bajos), Ramsés Campos y Malva Rodríguez (cubanos); así como los consagrados Lianne Vega, el Trío Dulcian, el Quinteto de Cámara Ventus Habana, y el Coro de Cámara Exaudi, entre otros.
Como en ocasiones anteriores, Mozart Habana rendirá honor al genio austríaco, gesto que en esta edición se extiende a dos pedagogos y compositores de gran influencia en la pianística y la cultura cubana, el holandés Hubert De Blanck (1856-1932) y el español Julián Orbón.
También honrará a la barcelonesa Alicia de Larrocha (1923-2009), reconocida por su proyección internacional y calificada como una las mejores intérpretes de piano del siglo XX, especialmente composiciones de Mozart y del repertorio ibérico. A ella se le dedicará el concierto del martes 3 de octubre, a las seis de la tarde, en el Oratorio San Felipe Neri.
El evento conectará espacios de celebrada acústica como el ya mencionado Oratorio San Felipe Neri, las salas Cervantes, Paula y la Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís.
El programa anuncia además el espectáculo Surque la Nave al puerto. Tesoros del setecientos en las catedrales españolas, en la Catedral de la Habana, dónde la prestigiosa agrupación española Harmonia del Parnàs, junto al coro Exaudi, dirigido por María Felicia Pérez, harán sonar música sacra siguiendo el concepto de «interpretación históricamente informada», es decir, con instrumentos y criterios musicológicamente documentados, que respetan (hasta donde es posible) las particularidades estéticas y teóricas de las obras, según el lugar y período concreto en que fueron compuestas.
De similar criterio será el concierto El amor cocinero. Tesoros de la música escénica española del siglo XVIII, que Harmonia del Parnàs ofrecerá en la Iglesia de San Francisco de Paula el viernes 6 de octubre, a las 6 de la tarde.
El Concierto de Clausura ha sido previsto para el sábado 7 de octubre, en la Basílica, con la participación de los músicos cubanos José E. Rodríguez (clarinete) y Ernesto Oliva (pianista), y el acompañamiento, como en casi todos los espectáculos, de la Orquesta del Lyceum de La Habana, bajo la batuta de José Antonio Méndez Padrón.
Mozart Habana ha sido organizado por la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH) y la fundación Mozarteum de Salzburgo, con el apoyo de instituciones cubanas como la Universidad de las Artes y el Centro Nacional de la Música de Concierto. Ha contado, además, con la coproducción del Centro Nacional de Difusión Musical de España (CNDM), acción que se enmarca en sus Circuitos Internacionales; y con la colaboración de la Consejería Cultural de la Embajada de España.
Este evento muestra la valía del proyecto iniciado en el 2007 por el músico cubano Ulises Hernández y la Fundación Internacional Mozarteum, enlazados de manera definitiva en el conocimiento, estudio y difusión del quehacer del compositor nacido en Salzburgo. Es así que surge el Lyceum Mozartiano de La Habana, que dio paso, en el 2016, a la Orquesta del Lyceum de La Habana (OLH), la cual ha sobresalido en el universo musical cubano por el rigor de su gestión musical y una profunda vocación pedagógica y de compromiso social.
Tal como reconoce el programa de Mozart Habana, la OLH “está integrada por jóvenes músicos graduados de la Universidad de las Artes de Cuba que desean acercarse a los diferentes estilos musicales desde el respeto a la partitura y al contexto histórico en que la música fue creada. Entre sus principales intereses se encuentra también la defensa del patrimonio sinfónico clásico cubano, así como el de las nuevas generaciones”.
Signados por esa entrega, común a toda obra gestada desde la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, el Lyceum Mozartiano creó, hace menos de un lustro, la Centro Sinfónico Infantil, un proyecto destinado a cultivar la sensibilidad y la cultura musical de familias que habitan La Habana Vieja y sus comunidades vecinas. De gran satisfacción ha resultado para los organizadores poder integrarlos al Festival en un Concierto especial para los niños, que tendrá lugar el sábado 7 de octubre, a las 11 de la mañana, en el Oratorio San Felipe Neri, tutorada por las profesoras María Verdecia y Yisel Amorós.
Tomado del Periódico Trabajadores