Por Yimel Díaz Malmierca
El quehacer de los ingenieros militares en Cuba durante la época colonial trascendió el levantamiento de fortificaciones de uso castrense y abarcó la construcción de obras que respondían a las urgencias civilizatorias del momento.
De aquel período fundacional de la identidad cubana heredamos edificaciones que constituyen verdaderas joyas arquitectónicas y de la infraestructura, entre las que podrían mencionarse, por solo citar dos ejemplos, el Palacio de los Capitanes Generales que hoy hospeda al Museo de la Ciudad, y el acueducto de Albear, obra que aun abastece el 18 % del agua que consume la capital y que fue concebida por coronel habanero ingeniero Francisco de Albear y Lara (1816-1887).
Precisamente el otrora Palacio de los Capitanes Generales — cuya construcción se le atribuye al también habanero e ingeniero militar Antonio Fernández Trevejos (1739-1800)—, abrió sus puertas al Doctor con Mención Internacional por la Universidad de Sevilla, Ignacio J. López Hernández, quien impartió la conferencia La Habana de los ingenieros, conflicto, progreso e identidad, investigación que sostiene además la exposición homónima que por estos días exhiben las verjas de esa otra joya de la arquitectura militar cubana que es el Castillo de la Real Fuerza.
Ponencia y exposición devienen paseo por 502 años de historia a través de documentos, dibujos y mapas que pertenecen a importantes colecciones del mundo, entre ellos el Archivo General de Indias (Sevilla, España); el Archivo General Militar, el Museo Naval y el Centro Geográfico del Ejército, todos en Madrid; la Biblioteca del Congreso de Washington, y la Universidad de Miami. Algunos de esos gráficos han sido poco vistos o inéditos pero en ellos “se explora la contribución de los ingenieros en la definición defensiva y urbana de La Habana”.
La urbe caribeña muy pronto despertó el interés de la metrópoli debido al “potencial estratégico de su puerto”, virtud que a la vez la llevó a convertirse en “una de las plazas más ambicionadas por las potencias enemigas” y, por tanto, una de las más custodiada desde el punto de vista militar.
“Actualmente las personas están mucho más especializadas, casi que hay un experto para cada función concreta — comentó Ignacio a esta reportera—, pero en la época que estudiamos el saber era mucho más enciclopédico, y un ingeniero podía estar levantando una fortificación, un camino y un alcantarillado”.
Esta visita a Cuba, con la conferencia y la inauguración de la exposición, son parte de la proyección comunicacional del proyecto de investigación Modelos de fortificación para la defensa del Caribe Occidental (1763-1825), del cual participa el propio López Hernández, licenciado en Historia del Arte por la Universidad de Sevilla y que también mira hacia al puerto mexicano de Veracruz, donde la semana próxima inaugurarán otra muestra expositiva.
La que ahora disfrutamos en La Habana está compuesta por 29 lienzografías que son el resultado de muchos empeños, entre ellos las universidades de Sevilla y Almería (donde fueron impresas las piezas), así como de expertos españoles, mexicanos y cubanos, como es el caso de Michael González, director de Patrimonio Cultural de la OHCH.
La muestra contiene imágenes que constituyen verdaderos hallazgos. Tal es el caso de un mapa de la bahía cuyo original se encuentra bajo la custodia de la Biblioteca Nacional de Francia, e imágenes del primer puente de hierro de Cuba e Hispanoamérica y del cual no quedan vestigios.
Cuando concluya el tiempo de exhibición acordado, las piezas engrosarán la colección permanente del museo Castillo de San Salvador de La Punta.
“Todos coincidimos en que no bastan las publicaciones científicas y académicas, es necesario desarrollar acciones de divulgación como estas para que los resultados de nuestras investigaciones lleguen a los ciudadanos y éstos puedan apreciar cómo se avanza en el conocimiento a “ojo de gigante”, aprovechando el saber de los científicos que nos precedieron”, reflexionó.
López Hernández aseguró que a esta exposición le seguirá un compendio que incluirá artículos redactados por los catedráticos que integran el Comité Científico que trabajó en la curaduría y estuvo integrado por los cubanos Michael González (OHCH) y Rolando Lloga Fernández (Universidad Tecnológica de La Habana); y los españoles Alfredo José Morales Martínez, Pedro Luengo Gutiérrez, Manuel Gámez Casado, y Pedro Cruz Freire, catedráticos de la Universidad de Sevilla.
Entre el auditorio que asistió a la conferencia y a la inauguración de la muestra se encontraban el agregado militar de España en Cuba, coronel Rafael Muñoz Cervantes; la doctora María Victoria Zardoya Loureda, profesora de Historia de la Arquitectura y el Urbanismo, Facultad de Arquitectura, Universidad Tecnológica de La Habana; el arqueólogo Roger Arrazcaeta Delgado, director del Gabinete de Arqueología de la OHCH; el equipo de trabajo sobre fortificaciones de la Dirección de Patrimonio Cultural de la OHCH y especialistas del Gabinete.
El tema de la contribución de los ingenieros militares apasiona desde hace años a López Hernández. Una indagación sobre este asunto en la ciudad de Matanzas se convirtió en su tesis doctoral, la cual discutió en el 2018 y hoy es un libro que aguarda por ser editado en Cuba. De esa investigación resalta que la “explosión constructiva vivida por el país en la segunda mitad del siglo XVIII y primera del siglo XIX, transformó a Matanzas de puerto centinela y punto geoestratégico importante, en uno de centros comerciales más importantes del país. Eso no habría sido posible sin la contribución de los ingenieros militares”, refiere.
Como parte de esta visita a Cuba, López Hernández realizará intercambios técnicos en la ciudad de Matanzas, en la OHCH y visitará el Castillo del Príncipe, “lo cual constituye un verdadero privilegio, seré la envidia de mis colegas”, aseguró. Los anfitriones de este último recorrido serán los especialistas de Museos Arqueológicos y del Grupo de Arqueología de la Empresa de Restauración del Patrimonio U. E. B Puerto de Carenas, quienes actualmente laboran en la investigación de ese inmueble.