Por: Yimel Díaz Malmierca
En los bajos de la casona hacia donde la Casa Eusebio Leal Spengler ha extendido su magia pueden apreciarse una treintena de dibujos infantiles cuyo elemento aglutinador es la figura del Historiador de la Ciudad.
Este es uno de “esos homenajes sinceros y desinteresados que logran vencer el olvido. Pervive y la late con estos dibujos una fuerza intemporal que llena nuestros corazones”, afirma Ariel Gil Gómez, responsable de la institución, en las notas al catálogo de la muestra Eusebio Leal, una mirada de fiñes.
“Guiados por el magisterio experimentado de la artista de la plástica Yasminna Guerra Prado, estos fiñes del proyecto Primeros trazos, de la escuela primaria Ormani Arenado, del municipio capitalino de Plaza de la Revolución, han logrado, desde su propio universo, que vuelva Leal a caminar su amada ciudad explicando cada secreto de nuestra historia”, afirma.
En conversación con esta reportera, Gil Gómez reconoció que “el gran reto de la Casa Leal es explicar a Eusebio ante las nuevas generaciones. Nosotros lo vivimos, lo vimos trabajar de una manera más o menos cercana, fuimos parte de su tiempo pero ¿cómo lo recordarán los niños si no lo conocieron?”.
“Al observar los dibujos descubrimos que el leitmotiv es la relación entre Leal y el Capitolio, reflexionó, lo cual podría explicarse a partir del protagonismo que tuvo esa edificación en la celebración del aniversario 500 de La Habana, o porque fue la sede de las exequias y del justo homenaje que el pueblo rindió al Historiador. De ahí surgió la propuesta de nuestra Directora Adjunta Perla Rosales de invitar a todos estos pequeños a una visita dirigida al Capitolio. Ya se la prometimos y lo haremos.”
“También nos ha llamado la atención que los niños participantes en esta exposición viven en el Vedado, un barrio algo alejado del Centro Histórico que ha sido, sin duda, el más beneficiado por las obras impulsadas por Leal, no obstante decidieron dedicarle una exposición. Ese interés ha hecho que los convidemos a participar del futuro Club de niños y jóvenes amigos de la Casa Leal, cuyo fin será promocionar el pensamiento de Eusebio”, concluyó.
El proyecto Primeros Trazos es el resultado de talleres de creación que durante 12 años ha conducido la artista Yasminna Guerra, quien comenzó auxiliando la formación de sus propios hijos en la escuela primaria Ormani Arenado, y ha creado un proyecto comunitario infantil de largo aliento al que se han sumado niños varias generaciones de niños entre 8 y 12 años.
“Además de obtener buenos resultados docentes, los niños deben mostrar sensibilidad, explicó Yasminna. Trabajamos una o dos veces a la semana, en sesiones contrarias a las clases curriculares, si estamos preparando alguna exposición o la participación en algún concurso o evento, pues nos vemos todas la veces que haga falta”.
“A propósito del aniversario 500 de La Habana organizamos una muestra grande en la escuela, los niños dibujaron a la ciudad. Luego, al morir Eusebio, los convocamos a que imaginaran al Historiador caminando por La Habana, el resultado ha sido esto que podemos ver aquí”, explicó Yasminna.
El proyecto Primeros trazos ha obtenido varios premios en diferentes concursos de artes plásticas, entre ellos Martí en mi barrio, y los anuales convocados por la Casa Natal y el Memorial José Martí. También han participado en varias ediciones del Pabellón Infantil de la Feria Internacional del Libro.
La inauguración Eusebio Leal, una mirada de fiñes, fue el colofón de la Fiesta del Libro Infantil en las Aulas Museos que durante varios días se desarrolló en el Centro Histórico. La muestra habitará la primera planta de la casona frente a la Casa Leal por varias semanas, donde comparte el espacio con piezas rescatadas por el Historiador, como son la escultura de Seres, los leones de mármol de Carrara que un día desecharon del Paseo del Prado, y obras de ese mundo onírico maravilloso que nos regala el artista Pedro Pablo Oliva.