Marionetas revividas

Por: Yimel Díaz Malmierca

Aquellos muñecos construidos por los mismos actores que le darían vida durante las puestas en escena de la versión cubana de Las brujas de Salem han renacido en el Teatro Museo El Arca, ubicado en la planta baja de la Casa Pedroso, en la Avenida del Puerto, y son parte de las celebraciones en Cuba por el Día Mundial de la Marioneta.

La fecha, también conocida como Día Mundial del Títere, se celebra cada 21 de marzo desde el 2003 a propuesta de la Unión Internacional de la Marioneta (UNIMA), con “el propósito de salvaguardar y renovar la larga tradición de esta expresión artística”.

Según la Enciclopedia Mundial de las Artes de la Marioneta (WEPA), las primeras presentaciones de este tipo de teatro en la isla fueron reportadas en 1792 por el Papel Periódico de La Habana. En ellas, el marionetista español Antonio Modesto y sus “descoyuntados muñequitos” bailaban al son de una guitarra. Dos años después, un “teatro mecánico” de Nueva Orleans presentó “figuras que se movían sobre una plataforma provista de resortes interiores”.

Otra de las referencias históricas nos remite al escritor cubano Buenaventura Pascual Ferrer (1772-1851), quien “menciona en Viaje en  la isla de Cuba (1798), a estos acróbatas, marionetistas, saltimbanquis y otros tipos de charlatanes de moda en Europa, que pasaban por Cuba antes de llegar a  México y  a Perú, dando testimonio de la  creciente popularidad que en esa época alcanzaban los espectáculos vivos y las mascaradas. A comienzos del siglo XIX,  compañías itinerantes que venían de  España comenzaron a viajar por la isla con espectáculos de circo, prestidigitación y marionetas”.

Mucha de esa herencia ha intentado recuperar El Arca, que esta vez también festejó la fecha con una conferencia magistral de la Master Yudd Favier sobre las infinitas posibilidades de la construcción titiritera.

Las brujas de Salem es una versión del clásico homónimo del dramaturgo y guionista estadounidense Arthur Miller (1915-2005). La adaptación y dirección corrió a cargo de Álvaro Torres Mendoza. Fue estrenada en la sala Adolfo Llauradó, en noviembre del 2016, durante la tercera edición de  Bacanal de Teatro de Títeres para Adultos. La puesta en escena y fabricación de los muñecos, correspondió a Proyecto 8, integrado por jóvenes que en aquel entonces eran estudiantes de la Universidad de las Artes. Los muñecos fueron diseñados por Paula Fernández Mederos y Jorge Emilio Álvarez Trinchet.

La exhibición podrá ser apreciada en El Arca hasta el 22 de mayo. Con esta exposición, la OHCH celebrará también el Día Internacional del Teatro (27 de marzo).

 

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