Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
Derroche de sensibilidad y humanismo se vivió en la noche de este viernes en la galería Carmen Montilla, de Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH), cuando un grupo de infantes, adolescentes y jóvenes que presentan necesidades especiales de fotoprotección se beneficiaron con diversas propuestas culturales, como parte del proyecto Somos uno.
Esta programa dio a conocer el ciclo de talleres Te cuento mi historia al revés, el cual apuesta por una cultura inclusiva. Se trata de encuentros que transcurrirán una vez al mes durante el próximo año, que promueven la igualdad de género y la sostenibilidad del medio ambiente, a través del desarrollo de la inteligencia emocional. Las temáticas abordadas tomarán como referentes historias de vida de diversas manifestaciones. Como resultados finales, se concebirán recursos comunicativos -audiovisuales, historietas, podcast, libros cartoneros-, donde se integre lo aprendido, se socialice la experiencia y aporten contenidos de valor, que inviten a la participación futura de otros públicos.
Los organizadores de la iniciativa, que esta vez celebró el 502 cumpleaños de la antigua villa de San Cristóbal de La Habana, son la galería Carmen Montilla y el Centro de Gestión Cultural de la OHCH, con la colaboración de otras instituciones, como a+ Espacios Adolescentes, el espacio creativo Tu Taller, Vitrina de Valonia, Habana Radio, y las psicólogas Rachel Fleites y Daniela Jardines, egresadas de la Universidad de La Habana, entre otros.
El programa de Somos uno incluyó la actuación de artistas del Teatro musical, a cargo de Alfonso Menéndez; y un recorrido por la exposición colectiva Más luces y sombras, en la propia galería Carmen Montilla, donde se comentó, además, sobre el último número de la revista infantil Con vara y sombrero.
La publicación, nacida en abril de 2007, refleja parte del quehacer sociocultural de museos y centros culturales de la OHCH, mediante secciones dedicadas a la literatura, manualidades, curiosidades, juegos, exposiciones, concursos, talleres y hasta recetas divertidas para fomentar adecuados hábitos alimenticios.
Con vara y sombrero, principal soporte comunicativo del programa social infantil, de la Dirección de Patrimonio Cultural, fue presentado por la narradora oral Yanet Lovet y la estudiante Camila Espronceda Ávila, quienes estimularon entre los participantes la lectura y el respeto a la ciudad.
Al final se realizó un recorrido por obras de reciente restauración de la OHCH, como la Casa del Chocolate y el Museo Teatro de Títeres El Arca; en este último se presentó la obra de teatro El hijo del viento, con autoría y diseño del director de la institución, Christian Medina, y la intervención de Aylen Luna y Ángel Montaner.
Esta edición de Somos Uno cuenta con el apoyo de Unicef, Cuba, y del proyecto de Cooperación “Fortalecimiento de los programas de atención a personas con discapacidad, que desarrolla la OHCH en el Centro Histórico, financiado por Euskal Fondoa”.