Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
Numerosas imágenes, algunas convencionales y otras muy interesantes, se integran a la exposición fotográfica Sobre viejos caminos, inaugurada en el Museo del Automóvil, fruto de un proyecto de colaboración con la Dirección de Patrimonio Documental, de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH).
La muestra, con la cual también abre sus puertas al público la atractiva instalación de la OHCH, deviene análisis cronológico desde los inicios del automovilismo en Cuba hasta alrededor de 1960, según explicó su director, Ignacio Reyes Fandiño.
Como mudos museos rodantes hoy circulan por La Habana decenas de estas vetustas maquinarias, gracias al ingenio y a la acuciante necesidad. Muchas personas poseen el coche que perteneció a sus padres o abuelos, o han adquirido un vehículo herencia de un viejo familiar del vendedor.
Con motivo de las celebraciones por los 502 años de la fundación de La Habana, se inauguró también en el Museo del Automóvil la sala de lectura Armando de la Guardia, fallecido en marzo pasado. Por voluntad expresa, él donó a la institución libros y revistas de su colección de automovilismo, que ahora conforman una pequeña biblioteca especializada en el recinto cultural.
Situado en San Ignacio núm. 305 – 309, en el Centro Histórico de la capital cubana, el Museo del Automóvil permanece abierto al visitante de martes a sábado, de 9:20 a.m. a 4:30 p.m., y los domingos, de 9:30 a.m. a 12:30 p.m.