Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
Cuando hace 83 años naciera, de manera oficial, la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH), el Dr. Emilio Roig de Leuchsenring, afirmó: “Tengo la firme convicción de que los empeños culturales jamás podrán tener eficacia si no se realizan colectivamente”.
El 11 de junio de 1938, el reconocido intelectual reunió a sus amigos para anunciarles la apertura de la OHCH y que ellos conocieran sobre su organización y funcionamiento, y también la labor que él había venido realizando desde que ocupó el cargo de Historiador.
En ese encuentro, Roig señaló que durante el desgobierno de Gerardo Machado quedó cesante en el cargo de Comisionado Intermunicipal, el cual desempeñaba desde 1927, y fue sustraído, en diciembre de 1931, el tomo original del Libro de Cabildos del tiempo de la dominación inglesa en La Habana, que él había editado, y tres años después devolvió un desconocido.
Añadió que “también se destruyeron por el fuego o arrojados al vertedero numerosos y valiosísimos expedientes de acontecimientos históricos, fincas rústicas y urbanas 
del Término municipal; calles, acueductos y obras públicas…”.
Una vez derrotado Machado, el Dr. Roig de Leuchsenring fue repuesto en el cargo de Comisionado Intermunicipal, y el primero de julio de 1935 nombrado Historiador de la Ciudad de La Habana por el Alcalde, Dr. Guillermo Belt.
En aquel histórico acto del 11 de junio de 1938, el también periodista se refirió a la publicación periódica de los Cuadernos de Historia Habanera, dedicados a popularizar, con fines educativos y culturales, la historia del Término Municipal de La Habana. Además, mencionó su intenso quehacer a favor de regular la denominación de las calles de La Habana y restituirles sus nombres antiguos, tradicionales y populares, y conservar aquellos monumentos o reliquias históricas de la ciudad.
Asimismo, en esa fecha, el Dr. Roig fundó la Biblioteca Histórica Cubana con la intención de salvar importantes colecciones privadas de los intelectuales del país, entre ellos, del propio patriota. Por su antigüedad y su valor, esta institución dirige el sistema de bibliotecas de la OHCH. Especializada en temática cubana, en ella se atesora el mayor patrimonio documental y bibliográfico del Centro Histórico.
