Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
En su activa incursión en la plataforma de WhatsApp, durante el presente mes, la Quinta de los Molinos continuó su quehacer sociocultural dirigido a los jóvenes, adultos y familiares beneficiarios del proyecto Quinta por la inclusión social.
Así, de lunes a sábado se desarrollaron Talleres de Manualidades, Jardinería, Pintura, Estimulación Psicopedagógica, Belleza y Autovalidismo; los martes y viernes, el de plantas; y de lunes a viernes, se realizó Lectoescritura, estas dos últimas acciones para jóvenes insertados laboralmente en ese recinto ecológico.
Mediante el grupo de WhatsApp Dialogarte, se mantuvieron los encuentros virtuales destinados a madres, padres y familia, en general, de personas con discapacidad intelectual, en aras de construir saberes diversos acerca del manejo de diferentes y complejas situaciones. En esta ocasión, se abordaron los límites y el ejercicio de la autoridad, autonomía e independencia de los hijos, autoestima y sexualidad.
También durante mayo, en el Avispero de los Molinos, en WhatsApp , transcurrieron otros Talleres de Manualidades y Belleza, con el desarrollo de un segundo ciclo para los adultos mayores.
La Quinta de los Molinos es un atractivo pulmón verde en La Habana que, una vez se controle la propagación de la Covid 19, reabrirá sus espacios para los amantes de la naturaleza y la historia, quienes tendrán la posibilidad de recorrer el primer Mariposario de Cuba, o visitar el museo consagrado a Máximo Gómez, quien, durante tres meses, en 1899, estableció allí la residencia con la familia y su Cuartel General.