Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
Con poco más de un año de haberse inaugurado, a propósito de los 500 años del nacimiento de La Habana, la Biblioteca Infantil Antonio Bachiller y Morales se suma a los esfuerzos que está realizando el país para mantener, a través de las teleclases, las actividades docentes de la Educación Primaria por la presencia de los niños en las casas, a causa de la propagación de la Covid 19 en el país.
De esta manera, en la página de Facebok de esa institución, de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH), los alumnos pueden encontrar respuestas a las tareas y trabajos prácticos, que se están orientando por vía de la Televisión Cubana.
Por ejemplo, esta plataforma virtual ya ha publicado el Álbum de la Patria, que abarca variados temas, como el sistema solar, los planetas y las fases de la Luna, entre otros tópicos.
La biblioteca está ubicada en la calle Reina núm. 359, en el municipio de Centro Habana, donde falleciera, en 1889, Bachiller y Morales, considerado el padre de la Bibliografía cubana. El fecundo y erudito escritor ejerció como catedrático en el Seminario de San Carlos, la Sociedad Económica de Amigos del País y la Universidad, así como fundó el Instituto de la Segunda Enseñanza de La Habana.
La casa, que debió cerrarse por su alto grado de deterioro constructivo, recobró su antiguo esplendor gracias a la obra de rehabilitación de la OHCH. Ahora es un centro cultural, donde los pequeños encuentran un espacio para leer, aprender, crecer, y hallar en la lectura el juicio que los hará mucho más libres.
Especializada en la infancia, desde cero hasta 11 años de edad, la institución posee varios salones divididos en ciclos, y, además, una bebeteca destinada a infantes que aún no caminan, con sonidos y luces para motivarlos; un área para niños discapacitados, salones multifuncionales, una ludoteca y una moderna mediateca para que estos aprendan a trabajar libros en 3 D.
Como biblioteca provincial, atiende a las escuelas del territorio y desarrolla numerosas acciones culturales, siempre a partir de la lectura, así como prioriza el trabajo comunitario con especial atención en la familia y los menores, en sentido general.