La etimología de su nombre constituye uno de los mayores aciertos de la humanidad, Eusebio Leal llenó con su vida y obra cada significado contenido en esos dos vocablos, apuntó el historiador cubano Félix Julio Alfonso.
Durante el programa televisivo Mesa Redonda, Alfonso destacó el amor de Leal por desentrañar el origen de las palabras y resaltó cómo su nombre hace referencia a alguien bueno, piadoso, que trae bondad, virtuoso, lo cual ensambla a la perfección con su apellido.
Asimismo, el ensayista y profesor universitario recordó cómo la magia de Eusebio lo sedujo a formar parte de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH), por su capacidad de trascender las fronteras del pensamiento a la acción, de soñar, crear, cargar piedras para la restauración de esta urbe y dedicarle los más hermosos textos.
“Un hijo de su tiempo y del futuro, un hombre de grandes pasiones, entre ellas, Cuba, su gran amor que conoció como pocos y explicó como nadie, dulce, delicado, el cubano más útil de su tiempo”, apuntó Alfonso.
Por su parte, la directora de Comunicación de la OHCH, Magda Resik, lo calificó como “tan leal como su apellido, que hizo sentir a los cubanos orgullosos, con una cultura inmensa, una capacidad excepcional de asociar los conocimientos, una memoria prodigiosa que le permitía sostener un discurso desde la oralidad e invitar a la acción”.
Igualmente, Perla González, directora adjunta de la OHCH, señaló el halo paternal que se extendía alrededor de Eusebio, su constante invitación a volar, soñar y crear, sin margen a errores; pues La Habana merece lo mejor.
El programa Mesa Redonda constituyó un espacio para rendir tributo a ese intelectual, cuya impronta continúa viva por las calles de su ciudad, vestida de sábanas blancas en su honor y de la cual partió físicamente el 31 de julio pasado.
La cita de intelectuales cubanos, cercanos a su vida y obra, sirvió de ocasión para rememorar a ese iluminado y visionario, que en una época cargada de contradicciones supo remover conciencias, apostar por la belleza, la identidad y la historia.
(Tomado de Prensa Latina)