Por Evelyn Fernández
Para rememorar espacios, construcciones y objetos y recordar la obra de una de las figuras más importantes de las letras hispanoamericanas, Dulce María Loynaz, se presentó en la Biblioteca Pública Rubén Martínez Villena el libro-catálogo y la exposición Últimos días de una casa, con obras del artista Luis Israel González.
El moderador, Jesús David Curbelo, destacó la obra poética de Dulce María Loynaz; así como su prosa Jardín (1951), Un verano en Tenerife (1958), Fe de vida (1994) y Cartas que no se extraviaron (1997). Asimismo, mencionó el texto de Norge Espinosa, quien hace referencia al poema Últimos días de una casa que, según asegura, “regresa en esta nueva edición con ilustraciones.”
Construcciones apuntaladas unas con otras se visualizan en las páginas del catálogo y en la exposición, jugando con el poema que retrata con palabras casas y mansiones. Con tonos ocres, blanco y negro, el creador exhibe esas casas silenciosas y en pie, a pesar del tiempo. A su vez, con minucioso detalle exhibe un universo nuevo que puede llegar a lo surreal.
Fundación, Vedado, Fugitivo y eterno, Puentes y Cerca del mar, entre otras, son algunas de las piezas que integran la muestra compuesta por 12 obras y que continuará abierta al público durante el mes de diciembre.