Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
El Dr. Eusebio Leal Spengler recibió de manos del Rey de España, Felipe VI, la Gran Cruz de la Real y Distinguida Orden Española de Carlos III, la más alta de las órdenes civiles de este país europeo, en ceremonia efectuada en el Salón de los Espejos del antiguo Palacio de los Capitanes Generales, hoy Museo de la Ciudad, situado frente a la Plaza de Armas, en el Centro Histórico de la capital cubana.
“Nada tiene nuestra Patria que no haya sido signado como hijos de españoles que somos, como nieto de español que fue Antonio Maceo, como hijo de español y española como fue José Martí. Nada tenemos ni nos ha sido otorgado que no se haya conseguido con enorme sacrificio”, sostuvo el Dr. Leal al referirse a los lazos que unen a España y Cuba.
“En esta historia, dijo, España siempre, de una forma o de otra, nos acompaña y, en cierta medida, aquella batalla perdida la hemos continuado, luchando por la dignidad de un pueblo que habla español, que siente como suyo el romancero y el verso, que ama la literatura y el arte, y que se siente orgulloso de sus padres gallegos, vascos, catalanes, canarios de habla llana.
“Gente del mar o de la tierra que vinieron un día a Cuba, formaron familias, están en nuestros cementerios, descansan de tal forma todavía, que no hay una sola casa cubana, blanca o negra, mulata o mestiza, donde no aparezca mandando en la mesa o desde la tumba, un padre español”.
Recordó el Historiador hechos importantes para los dos países, acontecidos en ese propio escenario: “En este salón ocurrieron acontecimientos extraordinarios para la historia común de España en América y, particularmente, de Cuba. El 1 de enero de 1899, exactamente en la posición en la que os encontráis, el último gobernante español en suelo cubano, General Adolfo Jiménez Castellanos, exclamó: “Señor, en cumplimiento del Tratado de París y de las ordenes de mi Rey, cesa de existir hoy, primero de enero, la soberanía de España en la isla de Cuba y comienza la de los Estados Unidos”.
“No lejos de aquí, a pocas leguas de La Habana, el Comandante en Jefe del Ejército Libertador de Cuba escribía: “Tristes se han ido ellos, y triste nos hemos quedado nosotros porque un poder extranjero os ha sustituido. Yo soñaba despedir con respeto a los valientes soldados españoles, con los cuales siempre luchamos frente a frente en los campos de batalla”.
La Real y Distinguida Orden Española de Carlos III fue establecida por el monarca Carlos III en 1771 con el lema latino Virtuti et merito. Desde su creación, es la más alta condecoración civil que puede ser otorgada en la nación ibérica y su objetivo es “recompensar a los ciudadanos que con sus esfuerzos, iniciativas y trabajos hayan prestado servicios eminentes y extraordinarios”.
Previo a la entrega de la distinción, en el patio del Museo de la Ciudad, los Reyes de España obsequiaron a la institución patrimonial un pendón con el escudo de la antigua villa de San Cristóbal, confeccionado artesanalmente, en tanto, el presidente del Parlamento cubano, Esteban Lazo Hernández, y el Primer secretario del Partido en La Habana, Luis Antonio Torres Iríbar, les reciprocaron con una réplica de la Giraldilla, símbolo de La Habana.
Felipe VI y su esposa, Letizia Ortiz, iniciaron su recorrido por el Centro Histórico con una parada en El Templete, monumento neoclásico, que exhibe los óleos de Jean Baptiste Vermay (1786-1833) de La Primera Misa y El Primer Cabildo, ambos de 1826, obras que constituyen la primera interpretación de lo que historiadores consideran la fundación de La Habana, el 16 de noviembre de 1519.
El Dr. Leal comentó a sus Altezas acerca del significado de la ceiba para los habaneros y cubanos todos, y las tradicionales vueltas que se realizan en torno al árbol, que siempre atrae la atención de lugareños y visitantes. Luego, al atravesar la Plaza de Armas admiraron la estatua de Carlos Manuel de Céspedes, Padre de la Patria, y penetraron en el antiguo Palacio de los Capitanes Generales, sede del poder español en Cuba durante más de cien años, en la época colonial, donde se realizó el acto de entrega de la distinción al Dr. Leal Spengler.