Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
La calle O’Reilly debe su nombre a una familia noble llegada de España en siglos pasados, con descendencia irlandesa, según se supo en el Andar la arquitectura dedicado a esta arteria del entorno colonial habanero, en el cual participó un nutrido público integrado por niños, jóvenes y adultos de diferentes edades.
La casa matriz de la Agencia de Viajes San Cristóbal, de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH), situada en O’Reilly y Tacón, y el Colegio Universitario San Gerónimo, facultad de la Universidad de La Habana donde se estudia la carrera Gestión y Preservación del Patrimonio Histórico-Cultural, acapararon la atención de los andantes en los primeros momentos del recorrido.
La arquitecta Vanessa Lugo, que condujo a los participantes, hizo un alto en la esquina de O’Reilly y San Ignacio, que fuera escenario de uno de los duelos más conocidos de La Habana, protagonizado por los miembros de la Cámara de Representantes Silverio Sánchez y Severo Moleón, quienes se disputaron terrenos de la otrora villa de San Cristóbal. Moleón resultó herido en el conflicto.
Se conoció que en ese espacio se restaura en la actualidad la Residencia Estudiantil Galbán-Lobo, para estudiantes cubanos y extranjeros, que tendrá aulas, salas de conferencias y otras áreas académicas. Galbán y Lobo fueron dos comerciantes nacionalizados como cubanos; el primero, de origen español; y el segundo, venezolano. Este último empresario, con sólidos conocimientos sobre la industria azucarera, fue una de las personas más adineradas de la capital cubana antes del triunfo de la Revolución.
También Lugo detuvo al grupo en Obispo y Cuba, donde se ejecuta una rehabilitación capital, para la nueva filial de la Fundación Antonio Núñez Jiménez, de la Naturaleza y el Hombre. Se rescata la estructura original del edificio, que “será lo más ecológica posible”. Su fachada exhibirá vegetación y su carpintería estará trabajada, en gran medida, a base de bambú y (re)utilizarán materiales constructivos de otras obras.
El Hotel Hacienda tendrá por sede el monumental inmueble donde radicaba, hasta la década de los años 90 del pasado siglo, el Ministerio de Finanzas y Precios, que también tuviera las funciones de banco. Esta y otras instituciones financieras cercanas formaban lo que se conoció como el Wall Street habanero.
Gracias a los esfuerzos de la OHCH, a finales de 2018 se rescató el espacio que ocupa hoy la Asociación Nacional Ornitológica de Cuba (ASOC), donde ahora pueden admirarse especies autóctonas de la Isla y ejemplares de Latinoamérica. Próximo a este sitio se encuentran Factoría Habana -centro para la creación y experimentación de la producción artística-, la tienda de patrimonio Sargadelos, que comercializa cerámicas manufacturadas, y la Casa Víctor Hugo, que promueve la obra del célebre escritor francés y profundiza en la cultura de esa nación europea.
Como punto final del recorrido, los participantes se detuvieron en la oficina central del Banco Metropolitano de La Habana, otrora Convento de Santa Catalina de Siena, inaugurado por tres monjas del Convento de Santa Clara. Después de la segunda mitad del siglo XIX las religiosas perdieron su intimidad y vendieron el edificio, que pasó a ser un banco, el National Bank of New York. En estos momentos se restaura para convertirse en el Hotel Metrópoli.
El recorrido por la calle O’Reilly se sumó a las numerosas atractivas propuestas de Rutas y Andares 2019, un programa dirigido a la familia cubana que este jueves tendrá su clausura en el teatro Martí, donde intervendrá, como ya es habitual, el Dr. Eusebio Leal Spengler, Historiador de la Ciudad de La Habana.