Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
En ocasión de los treinta años de la desaparición física de Nicolás Guillén, se develó una tarja consagrada al autor de Sóngoro cosongo en la Alameda de Paula, por miembros de la Fundación que lleva su nombre y el Dr. Eusebio Leal Spengler, Historiador de la Ciudad de La Habana.
Luego de la colocación de una ofrenda floral ante la escultura del Poeta Nacional, que mira hacia la bahía habanera, Nicolás Hernández Guillén, presidente de esa Fundación, señaló que la ubicación de la imagen no ´fue casualidad: “Este era uno de sus espacios preferidos, dijo, en una ciudad a la que quiso mucho. Todo el mundo sabe que él nació en Camagüey, pero sin La Habana no hubiera podido hacer gran parte de su obra; y amó profundamente a La Habana y, entre sus virtudes, también quiso mucho a Eusebio Leal”.
En la emotiva y sencilla ceremonia, el Dr. Leal aseveró que su generación conoció “la importancia del poeta, del artista, del hombre sensible y humano que fue. Nicolás trabajó por la unidad de los artistas, de los intelectuales; se dio cuenta que las revoluciones las hacen las vanguardias aguerridas”.
Tras apuntar que “nuestra mulatez no era de color sino de cultura, de la cual él fue apóstol y llamador intenso a partir de su obra”, agradeció al autor de la escultura, Enrique Angulo, por “una bella pieza, viril, hermosa” y manifestó que el monumento fue largamente pensado; es un Nicolás Guillén caminante. Hoy no venimos a descubrir un monumento, hoy venimos a algo que estaba ya”.
La colocación de la tarja fue punto de partida para evocar el aniversario 117 del natalicio de Guillén y el 30 de su fallecimiento. Así, hasta el próximo 16 de julio habrá lecturas de poemas, muestras de artes plásticas, presentaciones de libros y paneles académicos que tendrán como eje central la vida y la obra del Poeta Nacional, merecedor de la Orden José Martí en 1981.
Nicolás Guillén Batista (Camagüey, 10 de julio de 1902 – La Habana, 16 de julio de 1989) fue un periodista, poeta y político cubano, fundador de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac ) y su primer presidente.
La obra del también Premio Nacional de Literatura 1983 ha sido traducida a muchos idiomas y ha merecido comentarios elogiosos, así como estudios de destacadas personalidades de las letras contemporáneas. Entre sus títulos literarios más sobresalientes están Motivos de son, Elegía a Jesús Menéndez, Sóngoro cosongo y El son entero.