Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
El ritmo y la sonoridad han continuado durante la tercera y cuarta jornadas del 23 Festival Internacional de Danza en Paisajes Urbanos, Habana Vieja: Ciudad en Movimiento, que hasta este domingo se desarrolla en el entorno colonial de la capital cubana, con la participación de bailarines y coreógrafos de 18 países.
La Plaza de Armas ha sido uno de los escenarios, donde ha irrumpido con fuerza la danza. Un numeroso público ha colmado ese atractivo espacio para presenciar las actuaciones de la Compañía JJ, de La Habana, con la obra Dingalla, y la comparsa de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), que realizó un homenaje a Pello el Afrocán (Pedro Izquierdo Padrón), reconocido percusionista cubano, quien diera a conocer el ritmo Mozambique.
Otros sitios donde se congregó el público para ver las presentaciones de solistas y grupos danzarios fueron la esquina de Mercaderes y Obrapía, y el Parque Rumiñahui. En esos sitios se hizo sentir el arte de la compañía de Danza Contemporánea, de Colombia; el Laboratorio de Mónica Ornelas y Colectivo, de México; Margarita Hinojoza, de Ecuador; y Cuban Soho, Gran Danza, e Ibalú, estos últimos de Cuba.
También han despertado el interés de niños, jóvenes y adultos los grupos Kálamo Danza Contemporánea, y Semillero Danza Universidad El Bosque, de Colombia; Signos vitales, de México; Colectivo Bacanal, de Chile; así como Musicaribe y el Ballet Bertha Casañas, de Cuba.
En esta ocasión participan en la cita danzaria 29 conjuntos cubanos y representantes de Alemania, Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Estados Unidos, Italia, México, Noruega, Puerto Rico, Reino Unido, Suecia, Suiza y Uruguay.
Para este domingo en la mañana se anuncia una programación infantil, con la irrupción de agrupaciones de niños, en diferentes sedes del Centro Histórico. En la noche, a la hora del conocido Cañonazo de las nueve, comenzará la clausura de esta fiesta danzaría, que incentiva el intercambio de ideas y experiencias artísticas entre los pueblos.
Auspiciado por la compañía Danza-Teatro Retazos y la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, el Festival deviene contexto que propicia el desarrollo profesional mediante conferencias, talleres y cursos, impartidos por maestros nacionales y foráneos.