Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
Ya se ha cumplido la primera fase del sueño de situar en el Centro Histórico de La Habana una réplica de la estatua de José Martí, erigida en el inicio de la Avenida de las Américas del Parque Central de Nueva York, que fuera esculpida por la artista norteamericana Anna Hyatt Huntington.
Fruto de la contribución generosa de los cubanos y de los norteamericanos, de ambas orillas, la pieza forjada en bronce llegó esta semana al puerto habanero. La figura, de 3 toneladas, mide 5.67 metros de altura.
En junio de 2016 el Dr. Eusebio Leal Spengler señaló: “Cuando la réplica del monumento creado por Anna Hyatt –tras su larga travesía desde la fundición estadounidense en Filadelfia donde se moldeará y bruñirá el bronce–, se emplace en la rotonda central del gran jardín que se extiende desde la terraza norte del antiguo Palacio Presidencial hasta la confluencia de las calles Cárcel y Avenida de las Misiones, muy cerca de la estatua ecuestre del generalísimo Máximo Gómez, un camino histórico de ida y regreso quedará sellado”.
Más adelante explicó que es la única escultura que conoce “en que el Héroe está en el acto de morir, transfigurado con la idea que él mismo expresara un día: “Mi verso crecerá un día, (…) y yo también creceré””.
La creadora norteamericana Anna Hyatt Huntington (1876-1973), reflejó en esta obra el acto del sacrificio del Apóstol de la Independencia de Cuba, caído, con solo 42 años de edad, en combate el 19 de mayo de 1895. Según el Dr. Leal, la figura revela “la serenidad con que Martí asumió el mandato de su propio destino”.
En el que hoy se conoce como Parque 13 de Marzo, en La Habana, trabaja, desde hace algunas semanas, un equipo de la empresa cubana Restaura con el asesoramiento de la contraparte norteamericana –liderada por el Museo del Bronx y del comité creado al efecto en esa institución–, que ha acompañado todo el proceso.
El pedestal tendrá 5.03 metros de altura para un total de 10.70 metros que tendrá todo el conjunto; se revestirán la base con piezas de granito negro, también donadas para la ocasión. Todos los elementos del monumento recordarán al original, emplazado en New York, cerca de otras dos esculturas de los próceres latinoamericanos Simón Bolívar y José de San Martín.