Tomado del sitio web Habana Radio
Por María Victoria Pardo y Yamira Rodríguez
Fotos: Alexis Rodríguez
El Historiador de la Ciudad Doctor Eusebio Leal Spengler inauguró el encuentro de Arquitectura Vernácula este lunes, después de elogiar a la Cátedra Gonzalo de Cárdenas de Arquitectura Vernácula por haber mantenido durante 14 años las jornadas técnicas “de estímulo hacia una arquitectura imperecedera”, y de reconocer a sus responsables Javier de Cárdenas y Daniel Taboada “maestro de generaciones”.
En la Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís recibieron las medallas de miembros de la Cátedra Gonzalo de Cárdenas profesionales de la Oficina del Historiador y de otros sitios del país, en nombre de los cuales Félix Julio Alfonso, vicedecano docente del Colegio Universitario San Gerónimo de La Habana, expresó sentirse “honrados y dignificados en su condición profesional” y agradeció “por el esplendoroso regalo”. Igualmente recibieron la condición de miembros distinguidos de la cátedra cuatro representantes de la delegación española en las jornadas técnicas.
Los resultados de los concursos de fotografía y de literatura y comunicación fueron dados a conocer en el acto inaugural. En el primero, fueron premiadas las series: “Casa de Uno”, “Vernáculo” y “Fernando”, por la calidad de las fotografías y el valor documental de las mismas. En el certamen de literatura obtuvo reconocimiento especial el ensayo: “La Habana que pasó. Dos siglos de arquitectura, urbanismo y arte colonial. El caminante habanero”, donde se combina la descripción histórica con el vuelo poético, a decir del jurado.
A Gibara, en sus 200 años están dedicadas las XIV Jornadas Técnicas de Arquitectura Vernácula cuyas sesiones científicas se extienden durante esta semana en la Biblioteca Pública Rubén Martínez Villena. El también Director de la Red de Oficinas del Historiador y del Conservador en Cuba, subrayó en la apertura, el reconocimiento a ese pueblo holguinero y a su historiador Antonio de Jesús Lemus Nicolau, cuyo derroche de honestidad y decencia sumado a su defensa a ultranza del patrimonio de la Villa Blanca, hicieron expresar al Doctor Eusebio Leal: “Es una de esas personas que están en el corazón”.