Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
La autenticidad y la exclusividad de sus ediciones han distinguido a Opus Habana en el universo editorial cubano, cuyo número 50 de la revista fue presentado este jueves en el Aula Magna del Colegio Universitario San Gerónimo, en el entorno colonial de la capital cubana.
Al dar a conocer el nuevo ejemplar, el Historiador de la Ciudad de La Habana, Dr. Eusebio Leal Spengler, destacó las dos décadas de este medio de prensa. “Dicen que 20 años no es nada, dijo, pero es mucho tiempo, díganmelo a mí. Cada edición es un acto de creación, siempre difícil, junto al tiempo; al igual que la economía que permite la posibilidad de hacer cada número, y los colaboradores e intelectuales que participan de ella”.
La portada del núm. 50 de Opus Habana —Vol. XVI / No. 3, ago. 2015 / abr. 2016— está ilustrada con la obra Roca bruja (fotografía digital, 150 x 100 cm), realizada por el reconocido artista Tomás Sánchez.
La publicación se inicia con el editorial “Consagración de la ceiba”, en el que el Dr. Eusebio Leal Spengler sugiere asumir al árbol que hoy reverdece en El Templete como el inicio de una nueva etapa. En ese sentido, el intelectual indicó: “Recuerdo que en situaciones angustiosas asistí a la colocación de la Ceiba del Templete. Me tocó a mí el difícil papel de anunciarle al público, aquel día de noviembre, que el árbol plantado hace más de medio siglo, había muerto. Alguien me dejó un certificado, que debía ser un acta de fe, en la cual decía que la Ceiba no había muerto, sino que había pasado a un estado de infestación por un estrés traumático”. El ejemplar había sido afectado por hongo y termitas, y su reemplazo demandó añadir a la nueva ceiba, cerca de 60 metros cúbicos de tierra fértil.
En otra de las propuestas de este número, “La Habana es nombre de mujer”, Argel Calcines refiere estudios históricos que han abordado la fisonomía de esta ciudad para revelar sus secretos, uno de los cuales sigue siendo el motivo de su nombre.
“José María Vitier: la música como una inmensa amante” y “Documenta Musicae: Hitos de la preservación y gestión del patrimonio sonoro cubano” son otros trabajos que despertarán el interés de los lectores. El primero de ellos, a cargo de Mario Cremata Ferrán, aborda en una entrevista algunas de las facetas que explicarán por qué el pianista y compositor logró un resultado de trascendencia patrimonial, a pesar de sernos contemporáneo. En el segundo, Miriam Escudero trata acerca del rescate de la identidad musical cubana que durante dos décadas ha impulsado la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana.
La revista también enriquece sus páginas con “Tomás Sánchez: otra dimensión del paisaje”. En la entrevista, realizada por Estrella Díaz, el autor expresa que quisiera influir en sus homólogos cubanos, “no para que pinten como yo, sino para que se percaten de que el concepto de paisaje es muy grande, que se puede ver de múltiples maneras y que tiene otra dimensión”.
Se suma a esta nueva presentación “La luz sobre el Castillo. El faro del Morro”, texto en el cual Fernando Padilla González se detiene en el Castillo de los Tres Reyes del Morro, guía en el horizonte para los bajeles que arriban, zarpan o navegan en aguas cercanas al puerto de La Habana, además de constituir el símbolo por antonomasia de esta ciudad.
“Opus significa obra”, destacó el Historiador de la Ciudad al referirse a la revista, que cierra la presente edición con los trabajos “Bocetos de Zanelli para el Capitolio Nacional”, por Mario Cremata Ferrán; “La Habana Vieja, Patrimonio Mundial”, por Daniel Vasconcellos, y “Las mujeres, ¿contendientes y madrinas en lances de honor?”, de la pluma del Dr. Emilio Roig de Leuchsenring.
