Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
Un grupo de profesionales, liderados por el periodista César García Expósito, evocó en 1950 el natalicio del historiador y abogado Antonio Bachiller y Morales (La Habana, 1812 –1889), “padre de la bibliografía cubana”.
Con esa acción, quedaba instituido el Día del Bibliotecario Cubano, que también deviene merecido homenaje a todos los especialistas que, de manera silenciosa, altruista y culta, laboran en esos centros del saber.
El Centro Histórico de La Habana se suma a la celebración con una jornada, que, en su séptima edición, se desarrollará entre el 6 y el 10 de junio. El programa de acciones culturales incluye un evento científico, encuentro con profesores de la especialidad Ciencias de la Información, exposiciones, así como las habituales campañas E-Books, libros electrónicos, y Libros en movimiento. También será un atractivo el tratamiento de las bibliotecas desde la perspectiva del humor.
La jornada por el Día del Bibliotecario Cubano propiciará el intercambio de experiencias acerca de la preservación y difusión del patrimonio bibliográfico a través del diseño de productos y servicios de información. Está dedicada al aniversario 50 de la Biblioteca Alfonso Reyes, de la Casa de México, fundada el 9 de junio de 1966 por la Sociedad Cubano-Mexicana de Relaciones Culturales en el Vedado habanero, con sede desde 1988 en la Casa del Benemérito de las Américas Benito Juárez.
Los agasajos se inaugurarán el 6 de junio, a las diez de la mañana, en el Oratorio San Felipe Neri. Habrá una intervención especial a cargo de Gladys Collazo, presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, y actuará el Cuarteto de Clarinetes Vivace.
El 7 de junio se realizará el VI Coloquio Bibliotecario en el Centro Histórico de La Habana. Productos y Servicios de Información desde el Patrimonio Documental, con un homenaje de los bibliotecarios a Antonio Bachiller y Morales. Además, se presentará el libro Pippa Mediaslargas, ilustrado por niños del Centro Histórico, como resultado del taller Vamos a armar un libro.
Ese mismo día y el siguiente, en la Mediateca, se efectuará una Feria de productos y servicios de información y también se inaugurará la campaña E-Books, libros electrónicos para todos, a través de la cual el público podrá adquirir 1 gb de documentos electrónicos de literatura infantil-juvenil.
El Panel “Representar interacciones y garantizar el acceso. Los imperativos de la Organización y Representación de información en el escenario de la interdisciplinariedad está previsto para el 8 de junio, con la participación de los doctores Radamés Linares Columbié, Gretel Lobelle Fernández, Airelys Campos Herrera, Mayra Mena Mugica y Dunia Llanes Padrón.
La mañana del 9 de junio se consagrará a la Biblioteca Alfonso Reyes de la Casa de México, y las palabras de bienvenida de un encuentro estarán a cargo de Miguel Hernández, director de esa institución patrimonial, y de Natalia Bolívar, fundadora de la Sociedad Cubano-Mexicana de Relaciones Culturales. El programa abarca, asimismo, un recorrido por la biblioteca Alfonso Reyes, y la apertura de la muestra Todo México.
En otro momento de esa jornada, Javier Villaseñor, agregado cultural de la Embajada de México en Cuba, ofrecerá un conversatorio sobre la vida y la obra de Alfonso Reyes, y será inaugurada la exposición fotográfica Alfonso Reyes, el sendero de la vida y la ficción.
La clausura de la VII Jornada por el Día del Bibliotecario Cubano en el Centro Histórico de La Habana será el 10 de junio, en el Museo Napoleónico, donde se realizará el encuentro Quién es quién, dedicado a los bibliotecario del entorno colonial de la ciudad. Se prevé, además, la velada Las bibliotecas y el humor, con la presencia de caricaturistas de Palante y otros invitados.
El Centro Histórico de La Habana posee una red de instituciones compuesta por 20 bibliotecas: una Pública (Rubén Martínez Villena), una Universitaria (La del Colegio San Gerónimo de La Habana) y 18 especializadas, dentro de las cuales, la Biblioteca Histórica funciona como órgano rector.
La Biblioteca Pública atiende a todas las personas y actúa como enlace de las restantes bibliotecas con la comunidad, en tanto la Universitaria tiene una función dirigida a la docencia y a la formación de los estudiantes de la carrera de Preservación y Gestión del Patrimonio Histórico-Cultural. Las demás son especializadas en sus temáticas específicas: mundo árabe, numismática, poesía, Asia, historia de Cuba…