El Premio Nacional de Patrimonio por la Obra de la Vida le fue otorgado al Dr. Daniel Taboada por su brillante e integral trayectoria como arquitecto y profesor, por su amplia labor de divulgación en publicaciones diversas en Cuba y en otros países, y por la defensa del patrimonio cultural de la nación cubana en diferentes foros, consta en el acta del jurado.
En conferencia de prensa, celebrada en la Casa de Don Francisco de Arango y Parreño, se recordó que durante más de sesenta años de trabajo (en los que sobresale su quehacer en el CENCREM desde su creación y en la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana), Taboada ha realizado una meritoria labor en la intervención y restauración de relevantes inmuebles de la capital y otras ciudades del país como Matanzas y Cienfuegos, entre las que se destacan el Teatro Sauto, el Fuerte El Morrillo, el Castillo de Jagua y el Mausoleo a los Mártires del 5 de Septiembre.
En La Habana su labor abarca la restauración de edificaciones patrimoniales de los siglos XVII al XIX como la Casa del Conde Barreto, la de los Condes de la Reunión, el Palacio Aldama y los conventos de San Francisco de Asís y el de Santa Clara.
Se subrayó su sostenida contribución al estudio y la protección de la arquitectura vernácula, encauzada a través de la Cátedra “Gonzalo de Cárdenas”, bajo los auspicios de la Fundación Diego de Sagredo y la celebración, cada año de las Jornadas de Arquitectura Vernácula.
Taboada es Presidente de Honor de ICOMOS, miembro del CICOP Cuba (Centro Internacional para la Conservación del Patrimonio), de la Comisión Nacional de Monumentos y de la Comisión Provincial de La Habana, de UNAICC, de la UNEAC y de la Comisión de Carrera, del Consejo Científico y del Comité Académico del Colegio Universitario San Gerónimo de La Habana.
Posee la Distinción por la Cultura Nacional y el Diploma y Medalla Fernando Ortiz, otorgados por la Academia de Ciencias en 1987, el Premio Nacional de Arquitectura 1998, el Premio de Rehabilitación categoría Proyecto, por la restauración del Teatro Martí en 2002 y la Medalla de Honor al Mérito de la Universidad Jorge Tadeo Lozano de Cartagena de Indias en 1994, entre otras distinciones.
El jurado de la IV edición del Premio Nacional de Patrimonio Cultural por la Obra de la Vida estuvo conformado por el Dr. Eusebio Leal, Historiador de la Ciudad de La Habana, la profesora María Dolores Ortiz y el arquitecto José Linares.
