Por Teresa de Jesús Torres Espinosa
Según el Decreto Ley núm. 265 “Del Sistema Nacional de Archivos”, el 3 de noviembre se instituyó como el Día Nacional del Archivero Cubano, en conmemoración al nombramiento oficial en el año 1922 de Joaquín Llaverías Martínez, como Director del Archivo Nacional de Cuba.
No se puede hablar de un archivo histórico sin la presencia del archivero, esa persona que te orienta hacia la búsqueda de documentos, organiza los materiales y brinda otros detalles de interés así como las medidas de protección al usar algunos documentos, que, por el paso del tiempo y la humedad, pueden causar algún daño a la salud humana y en esos casos esa persona sugiere el uso de naso bucos, guantes y lupas.
El Archivero es transmisor de todo el caudal de información que atesoran los archivos históricos, por ser salvaguarda de los patrimonios documentales. Se argumentan los valores que tienen, basados fundamentalmente en que constituyen Patrimonio, Memoria, Identidad y Conocimiento.
Y el Archivero, como un profesional de la información, desarrolla habilidades y competencias para ejecutar sus funciones y ser un eslabón para el conocimiento. A propósito de esa efeméride, entre el 2 y el 6 de noviembre el Archivo, la Fototeca y la Biblioteca de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana celebrarán una jornada de conferencias y exposiciones relacionadas con el arte culinario.
En aras de impulsar el estudio y la defensa de valores patrimoniales, el encuentro servirá también como felicitación a los colaboradores de la Federación de Asociaciones Culinarias de Cuba y a los chefs de los hoteles del Centro Histórico, que se sumarán esta vez a los festejos.
Así, el Archivo expondrá menús de homenajes ofrecidos a personalidades de finales del siglo XIX y principios del XX, diseños de marcas de productos nacionales y extranjeros de 1900 a 1950, oficios relacionados con el gobierno colonial y la tramitación de los alimentos en la ciudad, Actas del Ayuntamiento de La Habana que revelan la discusión en el cabildo del tema de la alimentación, así como postales, caricaturas, correspondencia con membretes identificativos de comercios y colección facticia de recetarios de cocina y el modo de servir la mesa.
La muestra bibliográfica reunirá los Manuales del cocinero cubano, y el del pastelero, repostero, dulcero y licorista, de la segunda mitad del siglo XIX; libros acerca de las delicias de la mesa, comida criolla, cocina internacional, métodos prácticos de hacer chocolate y un exquisito recetario de los chefs de El Floridita, La Reguladora, La Zaragozana y El Castillo de Jagua.
Asimismo, podrán apreciarse artículos de El Fígaro, con noticias acerca de los banquetes ofrecidos en los hoteles de la ciudad, y de la revista Bohemia, que presentará un interesante reportaje acerca de dónde se comía en La Habana.
Todo lo anterior estará ambientado con una muestra de la Fototeca, en la que destacarán bellas imágenes de comedores, restaurantes y hoteles del entorno colonial de la ciudad, realizadas por prestigiosos artistas de la fotografía.
El Día del archivero se realizan en todo el país actos que promueven las acciones del Programa Nacional para la Preservación de la Memoria Histórica, instrumento vital que desde 2006 rige el trabajo de conservación del patrimonio cultural cubano.