Arte e industria en un abrazo

Se reservó espacio para los diseños textiles de relevantes artistas cubanos, algunos de los cuales también dejaron su sello en codiciadas latas de galletas

Por Isachi Fernández

15 de Octubre de 2015

Hasta la primera quincena de enero el público podrá disfrutar de la muestra Signos. Arte, industria y viceversa, inaugurada este martes en Factoría Habana y en la cual se recorren iniciativas de creadores cubanos de las últimas cinco décadas por hacer converger estas dos ramas del quehacer humano.

Con curaduría de Concha Fontenla y Antonio Eligio Fernández (Tonel), la exposición integra piezas de artistas de varias hornadas y entre ellos se destacan nombres como los de Amelia Peláez, René Portocarrero, Mariano Rodríguez y Cirenaica Moreira, entre otros.

La iniciativa, que según Fontenla y Tonel, carece de pretensiones didácticas y no se erige como propuesta excluyente, contempla experiencias significativas, entre ellas Telarte, Arte en la Fábrica, Arte en la Carretera, y Arte en el Muro con una selección de fotografías del estudio Figueroa Vives;  un documental de Idelfonso Ramos; siete camisas;  y una instalación articulada a partir de textiles.

Se suman pañuelos diseñados por artistas que fueron convocados décadas atrás por Casa de las Américas, institución que presta ahora las prendas junto a varias latas de galletas decoradas por creadores de la talla de René Portocarrero y Amelia Peláez.

La muestra, además, rinde tributo a la revista Signos (a través del diseño gráfico de Ernesto Oroza) y al Instituto Superior de Arte por mediación de uno de sus arquitectos, Roberto Gottardi. Por ello recibe al visitante un muro de ladrillos característico de ese conjunto arquitectónico, del cual se exhibe también una maqueta, abierta al cambio, es decir al futuro. Se completa la instalación con fotografías y dibujos, un banco de Gottardi y una video proyección de un documental, todo de Felipe Dulzaides.

Se exhiben, asimismo, muebles de la Empresa de Producciones Varias (Emprova), fundada por Gonzalo Córdova y María Victoria Caignet en la década de 1970. Hay que recordar que Emprova produjo muebles, asumió diseños de ropas, de casas de protocolo, hoteles, cafeterías, fue un hito en la historia reciente del diseño en Cuba.

Signos… se nos revela como una gran instalación que desde la misma entrada dialoga con el público a través de muebles, fotografías, telas e historietas.

Comments are closed.