Tomado del sitio web Habana Radio
Por Nadia Herrada Hidalgo
Melodías de los siglos XVIII y XIX se escucharon el pasado sábado 3 de octubre en la Iglesia del Espíritu Santo como parte del Festival Les Voix Humaines. El concierto “Un siglo entre natalicios” retomó canciones de nuestro patrimonio musical escritas en esa época por los compositores cubanos Esteban Salas y Laureano Fuentes.
En esta ocasión, se estrenaron varias piezas musicales como Tadet animam meam, Astros luminosos yStabat Mater dolorosa. Gracias a la acuciosa investigación y a las transcripciones de Miriam Escudero, Eduardo Sarmiento e Iránea Silva, el público pudo disfrutar de estas obras que, de no ser por esta importante labor de rescate, habrían quedado en el olvido.
El Coro Orfeón Santiago, dirigido por Electo Silva; la Camerata Vocale Sine Nomine, dirigida por la Maestra Leonor Suárez; y la Orquesta de Cámara de La Habana, dirigida por la Maestra Daiana García, protagonizaron la velada. Asimismo, Moisés Santiesteban acompañó a los solistas y coros con el precioso sonido del órgano.
La Doctora Miriam Escudero, directora del Gabinete de Patrimonio Musical Esteban Salas presentó cada una de las canciones, y leyó algunos pasajes bíblicos relacionados con las piezas. Salve Regina, dedicada a la Virgen María; el villancico de navidad Astros luminosos; y el Popule meus (improperio de Viernes Santo), fueron interpretados y aplaudidos por el auditorio.
Miriam Escudero, directora del Gabinete de Patrimonio Musical Esteban Salas
La Iglesia del Espíritu Santo fue acomodada especialmente para la velada. Los bancos donde se sientan los fieles se dispusieron a lo largo de toda la nave, de tal forma que solo con un leve giro se podía disfrutar lo que ocurría en ambos escenarios: uno ubicado en el altar y el otro en el extremo contrario. A pesar del espacio disponible, el público, de varias generaciones, abarrotó la sala.
Sin lugar a dudas, el concierto “Un siglo entre natalicios” sedujo a los espectadores. Las composiciones de los prestigiosos Esteban Salas (La Habana, 1725-Santiago de Cuba, 1803) y Laureano Fuentes (Santiago de Cuba, 1825-1898) renacieron para dar fe de la riqueza del patrimonio musical que atesora Cuba.
A Salas, representante del denominado Barroco Americano, se le atribuyen las más antiguas manifestaciones de la música culta cubana con texto en castellano, y se le recuerda por sus villancicos, cantadas y pastorelas. Mientras que Fuentes es considerado el más pródigo de los compositores de Cuba en el siglo XIX.
El concierto “Un siglo entre natalicios” fue resultado del proyecto “Nuestro Patrimonio, nuestro futuro –el fomento de la enseñanza del patrimonio musical como vector de cambio social–”, subvencionado por la Comisión Europea y gestionado por la Oficina del Historiador de La Habana, OIKOS y la Universidad de Valladolid. Fortalecer la enseñanza de la música patrimonial y su difusión es uno de los objetivos de este proyecto que pretende que las jóvenes generaciones tengan mayor acceso a la cultura y a la conservación de sus valores patrimoniales como agente transformador, con incidencia en el desarrollo humano local.