Por Isachi Fernández
Un grupo de investigadores fue distinguido este domingo por la Unión Nacional de Historiadores de Cuba en La Habana durante una ceremonia en la que también se le entregó el diploma María Teresa Freyre de Andrade a la Biblioteca Histórica Cubana y Americana Francisco González del Valle, sita en donde un día estuvo la primera universidad de la ciudad.
Los reconocimientos se hicieron coincidir con el Día del Historiador Cubano, que se celebra cada 19 de julio en recordación a la jornada de 1935 en que Emilio Roig de Leuchsenring fue designado como Historiador de la Ciudad, nombramiento que honró con entrega y consagración hasta su fallecimiento en 1964.
Precisamente durante el acto, que tradicionalmente se realiza en los jardines de la Basílica Menor de San Francisco de Asís, se depositó una ofrenda floral ante los restos mortuorios de Emilio Roig de Lechsenring y se le recordó por su pensamiento antiimperialista y por su obra.
Los investigadores Néstor García, Juana Rosales y Felipe Pérez recibieron el diploma que lleva el nombre del primer historiador de La Habana, en tanto el diploma Julio Le Riverend le fue conferido a Sergio Valdés Bernal, Avelino Víctor Couceiro y Rodolfo Sarracino.
De la Oficina del Historiador de La Habana, Rigoberto Méndez, director de la Casa de los Arabes, recibió el diploma Emilio Bacardí, distinción que también fue otorgada a María Cristina Peña, Miguel Adolfo Bonera y Jorge Antonio Calderón.
Asimismo, se entregó a María Caridad Pacheco y a Eduardo Vázquez Pérez el diploma Pablo de la Torriente Brau. Las palabras centrales fueron pronunciadas por el académico Andrés Zaldívar, vicepresidente de la Unión Nacional de Historiadores de Cuba en La Habana.