Tomado del sitio web Escambray
Por Arturo Delgado Pruna
Incontables episodios vivió Tintín, famoso personaje belga de historietas, al recorrer el mundo, pero Cuba nunca fue parte de su itinerario. Sin embargo, un coterráneo suyo, el dibujante Etienne Schréder, salda esa deuda con su constante presencia en la Vitrina de Valonia —única biblioteca cubana especializada en historietas, ubicada en La Habana— para impartir talleres de creación sobre dicho género.
Ahora el noveno arte lo ha traído por vez primera a Sancti Spíritus para compartir ideas y experiencias —este sábado a las diez de la mañana en el patio de la Uneac— con creadores cuyos trabajos están recogidos en el primer volumen compilatorio editado en esta provincia y con quienes se interesen por el cómic.
El repaso de las obras permitirá ampliar los conocimientos respecto al entintado, los encuadres, el diseño de personajes, el guion…, y sobre esa base podrán corregirse los defectos.
La iniciativa ha sido posible por la comunión de tres instituciones: la Vitrina de Valonia, Ediciones Luminaria y la Uneac provincial. Lysbeth Daumont Robles, especialista de la Vitrina que acompaña a Schréder, manifestó interés por mantener el vínculo que permita impulsar el movimiento gráfico local y afianzar su labor profesional, sobre todo porque, según afirmó, Sancti Spíritus cuenta con una riqueza literaria muy fuerte que puede servir de base a los dibujantes.
En Cuba suele asociarse la historieta con el público infantil, cuando lo cierto es que se trata de una industria que en el mundo tiene a los adultos como grandes consumidores de la llamada novela gráfica, vertiente con nula presencia en nuestras librerías.
Etienne Schréder representa la contraparte belga del proyecto de cooperación entre la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana y Valonia-Bruselas Internacional, “Laboratorio de producción de historietas”.