Tomado del sitio web Habana Patrimonial
Por Isachi Fernández
“Retos en la salvaguarda del patrimonio cultural inmaterial en Cuba” fue el título de la disertación que forma parte de un ciclo y que incluirá una intervención el próximo mes de marzo, de Gladys Collazo, presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio.
El funcionario se refirió a una herencia colectiva y cambiante, que requiere ser documentada si se pretende contar con una herramienta favorable a las comunidades. Definió el patrimonio inmaterial como aquello que los núcleos humanos valoran y consideran identitarios, y a partir de lo cual se organizan.
Al respecto, consideró la función del Estado como de protección y apoyo, pero solo la comunidad puede definir, por ejemplo, si es pertinente o no mantener sus festividades y las fechas de sus potenciales celebraciones.
Señaló que en muchos países se omite a determinados grupos humanos, se les margina y se cubre con un manto sus prácticas. En otros lugares, sostuvo, se da prioridad a lo que se considera identitario de la nación, e ilustró el caso con la llamada “auténtica Cuba”, en correspondencia con estereotipos y fórmulas diseñadas para el turismo.
El patrimonio está creciendo y modificándose continuamente, explicó el funcionario y arguyó que una buena política le devuelve el valor a la comunidad, a través de sus recursos y sus tradiciones, y potencia la educación asociada.