Por Ana Lidia García Hernández
Annia Leyva y Anibal de la Torre son dos jóvenes creadores que decidieron abordar problemáticas de nuestra sociedad a través del arte. Ella plasma en sus obras el tema de la homofobia. Él discursa sobre las falsas creencias. Ambos toman el cuerpo como centro de sus fotografías en blanco y negro y de pequeño formato.
Sus piezas se exponen desde este 12 de septiembre en un nuevo espacio de exhibición que brinda la Casa-Museo Oswaldo Guayasamín de la Oficina del Historiador de La Habana. Silencio roto, título de la muestra, es un enérgico llamado a la tolerancia y la honestidad y pone de manifiesto el interés de provocar fuertes sensaciones que conduzcan al debate y la reflexión del público.
Las obras de Annia Leyva presentan al cuerpo masculino junto a objetos de uso femenino como crayones labiales, sombrillas, flores: “En ellas intento reflejar la aversión que sienten algunas personas hacia los homosexuales”, explicó. En cuanto a la composición, destacó la curadora Susana García, son instantáneas sencillas ya que solo se presentan fragmentos de la figura humana y la fuerza de la imagen recae por lo general en el objeto femenino representado.
Por su parte, Anibal de la Torre apuesta por el autorretrato junto a diferentes complementos religiosos como crucifijos y velas, destacados por su ubicación en primer plano. Según comentó a Habana Radio De la Torre, su intención es reflejar las falsas creencias y la doble moralidad: “Vemos en la actualidad a muchas personas que utilizan la religión para obtener beneficios y quería denunciar a través de mi creación esas actitudes”.
Graduados de la Escuela de Instructores de Arte de Guantánamo en el año 2004, Annia Leyva y Anibal de la Torre han expuesto antes en Holguín, su ciudad natal, y Venezuela; y han obtenido varios premios y menciones en eventos de las artes plásticas.
Con Silencio roto quedó inaugurado un nuevo espacio de exhibición en la Casa consagrada al Pintor de Iberoamérica en el Centro Histórico habanero; así lo confirmó a nuestra emisora Aliana Martínez, directora de la institución. El pequeño salón, ubicado en uno de los corredores de la planta alta de la sede, acogerá a partir de este momento a artistas con propuestas de pequeño formato. “Tenemos la dualidad de ser museo y galería de arte y nos complace abrir nuestras puertas al arte, en especial a aquellos jóvenes ávidos de espacios para poner a dialogar su obra con el público”, refirió Martínez.